Es un método de tratamiento que examina el papel de los pensamientos o creencias y cómo repercuten en el comportamiento y las emociones. Ayuda a obtener una mejor comprensión de la manera en que las interpretaciones de los hechos y las creencias impactan sobre la cotidianidad. La psicoterapia cognitiva se centra en el análisis de los pensamientos e ideas que pueden estar distorsionados. Este enfoque es útil para una gran variedad de trastornos. Normalmente la terapia cognitiva se combina con la conductual, siendo gracias a la unión de éstas cuando se alcanza el mayor potencial de ayuda (terapia cognitivo conductual).
La Terapia Cognitivo Conductual tiene un final, exceptuando los casos de patologías crónicas. La duración de un tratamiento depende de muchos factores, pero principalmente de dos. Primero, el diagnóstico, pues hay problemas cuya solución es más rápida y sencilla. Segundo, el compromiso del paciente; pues en Terapia Cognitivo Conductual acostumbramos dar a los pacientes ejercicios y tareas; cuanto más se dedique el paciente, más rápidamente se logran los objetivos.
Nosotros no tenemos terapias de varios años de duración. Exceptuando los casos crónicos, es inusual que un tratamiento psicológico se extienda mucho más que un año y casi siempre duran menos de dos años.